Inteligencia Emocional: La Asertividad.

La asertividad es un concepto relacionado con las habilidades sociales de las personas que se debe tener en cuenta a la hora de educar a los niños para que sean capaces de relacionarse y mantenga en buen estado su autoestima.

La asertividad es la habilidad que nos permite expresar libremente nuestras ideas y opiniones, sin agredir a los demás y sin ser agredidos. Es la capacidad de defender nuestros derechos y sentimientos, saber decir que no también.

La capacidad de poder expresarnos libremente, de poder decir lo que nos molesta, lo que nos gusta, sin agredir a la otra persona es fundamental para una autoestima sana y para unas relaciones sociales justas y equilibradas.

Debemos fomentar en los niños y niñas un estilo asertivo de interacción. Es fundamental que tenga la fuerza para dar sus opiniones y defenderse, y que  al mismo tiempo sean tolerantes para respetar a los demás.

Existen dos formas de asertividad

  1. Asertividad de aprobación: cuando se expresa el agrado, el acuerdo o la conformidad con lo que los demás hacen o respecto a las cosas que se perciben en el ambiente o en las personas.
  2. Asertividad de rechazo: cuando se expresan los sentimientos de desagrado, desacuerdo o inconformidad con la conducta o las ideas de otra persona o acerca de determinadas situaciones.

¿CÓMO PODEMOS AYUDAR A LOS NIÑOS Y NIÑAS A SER ASERTIVOS?

La asertividad es una habilidad que se puede desarrollar.

  • Crea un clima libre de comunicación, donde los niños y niñas sientan que tienen libertad de opinión y expresión. Escucha sus opiniones, no les cortes y atiende a lo que dicen, no juzgues sus deseos ni sus ideas.
  • Enséñale a decir lo que le molesta y lo que no le gusta con respeto. La idea no es que tienen que callarse por educación, sino que lo educado es decir las cosas pero con respeto y sin faltar a nadie.
  • Cultiva la autoestima de los más pequeños. Si tienen una sana autoestima y una imagen positiva de sí mismos no tendrán miedo a expresarse libremente, no tendrán miedo a las críticas y al rechazo, entenderán que sus derechos son tan importantes como los de los demás.
  • Estimula la responsabilidad. Los niños y niñas responsables, lo son también de lo que dicen y como lo dicen. Con esto conseguimos que se hagan responsables de sus palabras, si están agreden a los demás son ellos los responsables. Tendrán por lo tanto que pensar la forma de decir las cosas sin dañar a los demás
  • Transmite confianza y fortalece así su identidad. A veces es difícil tener confianza para decir lo que uno piensa en realidad, es importante que cuando el niño o la niña diga alguna cosa que le molesta o una opinión contraria a la nuestra, no le riñamos por ello. Le escucharemos y tendremos en cuenta su opinión, si lo dice de una forma no adecuada le explicaremos que puede decirlo de otra manera.
  • Favorece la Empatía. Enséñale a ponerse en el lugar de los demás.
  • Ayúdale a tener criterio propio. Para ello cultivaremos su mente de forma que tengan su propio criterio. Para ello, no le impongas lo que tiene que hacer, ayúdale  a elegir presentándole varias alternativas.
  • Enseña a respetar opiniones y tenerlas en cuenta. Para ello es fundamental que le enseñemos a escuchar a los demás puede que nos digan cosas interesantes. Le explicaremos también que si todos estamos contentos ganamos todos.

 

 

 

 

Última modificación: 09/02/2016 - 20:11